En este articulo queremos dar a entender los principios de la creación y enfoque de la visión estratégica, desde un principio y ser lo más claro posible: los negocios del escenario actual se dividen entre los que tienen visión estratégica y los que carecen de ella. Desde un comienzo se puede visualizar ya que unos sobresalen por su rentabilidad, financiación o improvisación, planes de expansión o en ocasiones las estrategias de repliegue.
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Visión estratégica, ¿Qué es? ¿Cómo desarrollarla?
La visión estratégica es una representación del futuro deseado, que es a la vez racional e intuitiva, abarcadora y prospectiva. Propone un marco de intervención convergente y coherente para la realización de una ambición común. El atributo «estratégico» implica que la visión sirve para coordinar una serie de acciones con un objetivo concreto.
Al hablar de visión estratégica, lo más habitual es que pensemos en los documentos oficiales, las guías o los estatutos de una empresa que de vez en cuando consultamos. Sin embargo, más allá de pensar en un término de manual corporativo, es necesario sacar el concepto del tópico y ponerlo en su dimensión real.
Visión estratégica es la capacidad de quienes están al frente de un negocio de saber mirar tanto su entorno como las relaciones, incidencias e impacto del mismo en la empresa que lideran.
Se debe tener en cuenta lo siguiente; la visión comúnmente se utiliza como un sinónimo del término declaración de misión, pero cada uno tiene sus propias distinciones que explicaremos a continuación:
- Una declaración de misión es un concepto global que es intemporal, lo que significa que probablemente no cambiará a menos que la organización pase por una transformación importante. A un alto nivel, esta declaración describe lo que hace la empresa, o cómo la organización se diferencia de otras en su espacio competitivo.
- Una declaración de visión estratégica apoya la declaración de la misión, pero es más tangible. Describe un estado futuro alcanzable de una organización, los plazos exactos pueden variar, estos normalmente oscilan entre los 3 y 10 años. Esta declaración debería ayudarte a ti y a tus empleados a visualizar hacia dónde se dirige la organización.
Dado que la visión estratégica está sujeta a plazos, es probable que crees (y recrees) tu declaración en varias ocasiones. Cada vez que revises tu visión empresarial tendrás otra oportunidad para definir el camino que tu organización va a seguir o en otras palabras quiere decir que la visión estratégica es la sumatoria de la visión empresarial que se desarrolla con el tiempo.
¿Quién elabora una visión estratégica?
La elaboración de la visión de la empresa corresponde sobre todo a su líder o lideres de la organización. En función de sus aspiraciones, de su evaluación personal y de otros factores externos (evolución del mercado; competencia) propondrá una imaginación del futuro de su empresa. En otras palabras, debes mostrar liderazgo y credibilidad llevando a cabo una estrategia sólida y relevante, coherente con el futuro deseable de tu negocio. Aunque esta misión no sea fácil, es esencial para la prosperidad e incluso la durabilidad de la empresa.
Ventajas de contar con una visión estratégica
Tener una visión clara y estratégica para tu negocio es fundamental, es una base esencial para la salud de tu negocio. A continuación mencionaremos unos beneficios de contar con la Visión Estratégica:
- Te permite tomar decisiones rápidas y bien informadas.
- Contar con una planeación previa de tus acciones
- Aumenta la motivación de todo el equipo
- Permite una mejor observación y análisis de tus cifras clave (KPIs, cifras de ventas, presupuestos y facturas emitidas, etc)
- Ahorro de tiempo y mayor productividad porque se tiene una guía
- Reflexionar de manera serena tus acciones y decisiones sin tener que actuar por impulso.
¿Cuáles son los componentes de la visión estratégica?
Sin embargo, una vez dicho esto es necesario distinguir entre dos componentes de la visión estratégica: el abstracto y el concreto. Mencionaremos de que trata cada uno de los componentes a continuación:
- Componente abstracto: determina cuáles son los elementos que mayor valor dentro de la cadena productiva, así como las razones para ello.
- Componente concreto: hace referencia a la habilidad de los directores o responsables de una compañía de identificar los elementos tanto positivos como negativos que integran la cadena de valor.
¿Qué es una cadena de valor y para qué sirve?
Previamente hablamos sobre la cadena de valor y a lo mejor has oído hablar de la cadena de valor. Te explicamos a continuación; se trata de un concepto de negocios muy importante, el cual puede aumentar las posibilidades de rentabilidad de una empresa y el conocerlo resultará muy útil para ti si tienes en mente estudiar administración o alguna otra carrera relacionada a los negocios.
Una cadena de valor es un modelo de negocios que describe el rango completo de actividades necesarias para crear un producto o servicio. Para las empresas que producen bienes, esta cadena comprende los pasos que llevan un producto desde la etapa de concepción hasta la de distribución.
Las empresas pueden realizar un análisis de cadena de valor al evaluar los procedimientos relacionados a cada paso que deben seguir. Su propósito es incrementar la eficiencia en la producción a fin de entregar el máximo valor con el menor gasto posible.
Fue Michael E. Porter, de la Escuela de Negocios de Harvard, quien introdujo el concepto en su libro Ventaja Competitiva: Creación y sostenimiento de un desempeño superior, publicado en 1985. En él sostenía que la ventaja competitiva se desprende de las actividades que una empresa lleva a cabo al diseñar, producir y entregar su producto.
La competencia por los establecer precios más bajos, lanzar mejores productos y fidelizar a la clientela está siempre presente. Es por eso que las empresas deben examinar continuamente el valor que ofrecen a fin de mantener una ventaja competitiva. Asegurarse de que la mecánica de producción resulte eficiente y fluida, es fundamental que las empresas se enfoquen en hacer que sus clientes se sientan seguros de lo que adquieren. Es en ese punto que la cadena de valores resulta muy útil.
Componentes de la cadena de valor
En líneas generales, podemos dividir los componentes de la cadena de valores en dos categorías: primarias y secundarias. Las actividades específicas en cada una de estas variarán de acuerdo a cada industria.
Actividades primarias: Están conformadas por cinco componentes. El objetivo principal de estas es añadir valor y crear una ventaja competitiva.
- Logística de entrada
- Operaciones
- Logística de salida
- Marketing y ventas
- Servicio
Actividades secundarias: Su rol principal es el de aumentar la efectividad de las actividades primarias. Estas son cuatro y cuando incrementas el nivel de cualquiera de ellas, logras beneficiar por lo menos una de las actividades primarias.
- Adquisición
- Desarrollo tecnológico
- Gestión de recursos humanos
- Infraestructura
Ya que hemos explicado lo que es la cadena de valor, continuemos con la temática ¿Cómo elaborar una visión estratégica?
El desarrollo de una visión implica la creación de un consenso que resulte de las preocupaciones o valores colectivos, proporcione el entorno natural y construido deseado y permita el funcionamiento óptimo de las actividades.
En este articulo te presentamos 5 pasos que debes seguir para desarrollar una visión estratégica exitosa:
1. Establece objetivos tangibles
Las metas que establezcas deben ser lo suficientemente claras para saber exactamente cuándo las has logrado. Establecer objetivos precisos como parte de tu visión estratégica asegurará que todos en tu organización sepan hacia dónde se están dirigiendo.
Cualquier ambigüedad en tu declaración puede convertirse en malentendidos operacionales que probablemente se vuelvan un obstáculo en tu éxito. Puedes utilizar un mapa estratégico para poder identificar los objetivos relevantes.
¿Qué es un mapa de estrategia?
Un mapa estratégico es una completa representación visual de la estrategia de una organización, describe el proceso de creación de valor mediante una serie de relaciones de causa y efecto entre los objetivos de las cuatro perspectivas del Balanced Scorecard o Cuadro de Mando Integral.
2. Sé realista
La visión estratégica de una empresa debe ser ambiciosa, pero también realista. Según los recursos de los que dispone tu empresa, ¿puedes realmente alcanzar los objetivos deseados? Por ejemplo, si quieres convertirte en el número uno de tu industria, pero el actual líder del mercado tiene diez veces tus ingresos anuales, estamos de acuerdo que este es un obstáculo importante a superar, ¿verdad?.
La cantidad de esfuerzo(tiempo, eficiencia, eficacia, entre otros) y recursos (monetarios, personal, entre otros) necesarios para superar este tipo de objetivos probablemente no sea factible en unos pocos años, es por eso que te recomiendo ajustar tus objetivos para centrarte en mejorar tu cuota de mercado o en vencer a los competidores con ingresos razonablemente superiores a los tuyos.
3. Ten en cuenta tu misión
La declaración de tu misión debe servir siempre de guía tanto para tus esfuerzos operativos como estratégicos. Cuando desarrolles tu declaración de visión estratégica, asegúrate de que cualquier objetivo que elijas no vaya en contra de tu misión.
Las declaraciones desalineadas pueden dar lugar a acciones conflictivas dentro de cualquier organización, y de hecho, pueden llegar a impactar de manera negativa en la cultura de la empresa e incluso en el rendimiento financiero.
4. Guía e inspirar a tu fuerza de trabajo
Un elemento que una visión estratégica tiene en común con una declaración de misión es la capacidad de guiar e inspirar a los que están dentro de la organización. La diferencia radica en cómo cada declaración logra esta hazaña. Tu misión influye en la toma de decisiones generales entre los empleados, y su visión estratégica es la que ayuda a los líderes a idear acciones específicas para alcanzar los objetivos deseados.
¿Cómo inspiro a mi equipo de trabajo?
4.1. Coloca a cada persona donde le corresponde.- Es importante que cada trabajador realice aquella tarea que se ajusta mejor a sus competencias y aptitudes porque, en caso contrario, la desmotivación puede llegar enseguida. Si un miembro del equipo está trabajando en una determinada actividad para la que no está capacitado, puede aparecer estrés y miedo al no contar con la suficiente preparación para ello. Por otro lado, si está demasiado cualificado para el puesto que ocupa se terminará aburriendo. En ambos casos estaremos desperdiciando un talento que merece la pena aprovechar.
4.2. Reconoce su valía.- Los miembros del equipo deben sentirse parte de él. Debes tenerlos en cuenta a la hora de fijar los objetivos y tomar decisiones, es fundamental que fluya la comunicación entre todos e imprescindible que reconozcas cuando el trabajo se ha hecho bien o si ha alcanzado alguno de los objetivos fijados. Basta con unas palabras de aliento, agradecimiento y renovarán energías para continuar trabajando hacia el éxito.
4.3. Sé flexible.- Trabajar encorsetado y bajo unas normas inamovibles no va a hacer que los empleados rindan más, de hecho, todo lo contrario. La flexibilidad en el entorno de trabajo impulsa la productividad del equipo, cuyos miembros se encuentran más cómodos, más felices y comprometidos con lo que tienen entre manos. Se trata de trabajar la empatía y acercarte a cada uno de ellos para mostrar interés por una determinada situación personal que pueda necesitar cierta tolerancia.
4.4. Crea un buen ambiente de trabajo.- Cuando hablamos del buen ambiente de trabajo nos referimos tanto al físico, de la propia oficina, como al de las relaciones entre los empleados. En el primer caso, un entorno agradable, cómodo y que cubra todas sus necesidades materiales siempre logrará inspirar a tu equipo de trabajo. Si disponen de las herramientas necesarias para su desempeño y la oficina tiene óptimas condiciones de luminosidad, es confortable y funcional, los miembros del equipo se encontrarán con ganas de trabajar en ese lugar. El buen ambiente llega también a través de unas relaciones cordiales, y basadas en el respeto y la comunicación. Y cuantas más sonrisas haya, mucho mejor para todos. Una convivencia agradable hará que la productividad se incremente de manera considerable.
4.5. Ofrece oportunidades de crecimiento.- Un trabajador que piensa que las cosas no van a cambiar nunca encontrará motivación para esmerarse al máximo en su día a día y sacar adelante los proyectos. Sin embargo, saber que ese esfuerzo puede desembocar en una nueva oportunidad profesional y personal será una gran motivación para hacerlo. Asegúrate de proporcionarles escenarios para crecer y desarrollarse dentro de la empresa.
4.6. Rompe con la rutina.- No puedes permitir que tu equipo se aburra y pierda su entusiasmo, ya que esa sensación de hastío traerá nefastas consecuencias para el proyecto y para la empresa. Una de las formas de hacer algo diferente y que fomenta la sensación de pertenencia al grupo, pero lo hace de una manera divertida y en un entorno distinto, son las actividades de team building. Para ayudarte, a continuación hemos enumerado 5 ejemplos de actividades de formación de equipos que se pueden aplicar en las empresas: Actividades deportivas, Amigo secreto, Actividades de voluntariado, Competiciones y Eventos internos, entre otros.
5. Adáptate cuando sea necesario.
Dependiendo del tipo de negocio que operes, puede que tengas que cambiar tu visión estratégica de vez en cuando. Aceptar este hecho contribuye en gran medida a garantizar que tu organización sea más ágil y adaptable.
Conclusión: Las declaraciones de una visión estratégica hacen que las organizaciones avancen de forma consistente en línea con su misión. Con todos los empleados a bordo, tienes una mejor oportunidad de alcanzar los objetivos. Recuerda que también debes tomar medidas concretas para hacer realidad tu visión estratégica. Inicia proyectos relevantes con plazos que se alineen con la línea de tiempo de tu visión.
Ten en mente igual medir el progreso, por ejemplo a través de un dashboard y gestionar los proyectos de forma eficiente y ahorrar tiempo en la elaboración de informes.
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